«Mario», o cómo disfrutar una película en la actualidad

CINE / crítica

ALEXIS Sebastián Méndez

The Super Mario Bros. Movie

Protagonistas: Chris Pratt, Jack Black, Charlie Day, Anya Taylor-Joy

Directores: Aaron Horvath, Michael Jelenic

Año: 2023

De qué trata: Basado en la serie de juegos de “Mario” para la consola de Nintendo. Acompañamos a los hermanos “Mario” y “Luigi” en su primera aventura en el “Mushroom Kingdom”, donde la “Princesa Peach” se prepara para defender su reino contra la invasión del malvado “Bowser”, quien pretende casarse con ella.

Poster, tan colorido como el filme

Opinión: ¿Sirve una opinión en una película como ésta? O debo decir: ¿Vale la opinar de los argumentos de las películas actuales, cuando un grupo de personas en las redes parece más interesado en la politización de ofrecimientos dirigidos (en gran parte) a los niños? ¿Se puede evaluar el argumento de un filme que va a funcionar por mera referencia nostálgica?

Entiendo bastante del uso de nostalgia para crear historias (¿han escuchado de “De-Generación 80”?). Ahora, la nostalgia debe ser un elemento para construir algo interesante. Al público le gusta la reacción de reconocimiento. Pero usted puede hacer comedias formidables como “Airplane!”, donde las referencias construyen una formidable parodia, o cintas detestables como “Epic Movie”, que piensan que la mera referencia es el chiste.

Usando ejemplos más recientes: “Ready Player One” construye una historia interesante usando este tipo de elementos, mientras que “Spider-Man: No Way Home”, tiene un argumento ilógico, chapucero y hasta estúpido, pero las apariciones de otras versiones del personaje, fue suficiente para satisfacer al público.

El éxito gigantesco de la mencionada película del Hombre-Araña, significa que estoy desconectado de las preferencias del público.

Dicho esto, bastaba con que “The Super Mario Bros. Movie” hiciera referencias que los fanáticos identificaran, y el éxito estaba asegurado. En eso, la película no escatima: Hay enfrentamientos al estilo de “Smash”, una carrera por “Rainbow Road” (con un “blue shell” kamikaze) y retazos de música distintiva de distintos juegos. No se limita al mundo de “Mario”: hay saludos a “Punch-Out”, “Kid Icarus” y muchos otros clásicos.

Si iban a escoger una pista de «Mario Kart», ésta era la obligada

Dicho esto, el filme se ocupa de darle buen uso a esos toques de nostalgia: Nada parece traído por los pelos, y funciona con buen engranaje dentro de la historia construida.

La película cuida todas sus esquinas: Está saturada de referencias, sin extender la práctica duración de hora y media. El filme cuida establecer un conflicto para humanizar a “Mario” (busca el respeto de su familia), distingue la personalidad de los personajes, brinca con frecuencia a la acción, tiene toques de humor sin esforzarse mucho, cuenta con excelente música y una animación jugosa para los ojos.

No digo que sea un gran filme. La historia es efectiva, pero no es formidable. Los personajes son agradables, pero fuera de inolvidables. En fin, no creo que sea una joya como algunos sienten, pero aprecio que el filme refleje el respeto de los creadores tanto a los fanáticos de Nintendo como a los cinéfilos. No buscaron conseguir dinero fácil, se esforzaron en crear un buen producto.

Lo que no entiendo es porque hay tanta gente que no puede disfrutar una película como ésta en paz.

Cuando el filme estrenó, leí algunas críticas de personas que consideraban el filme como “woke” (la tendencia progresista de querer transformar todo en “inclusión”), ya que “Mario” no debía rescatar a la “Princesa Peach”, sino a su hermano “Luigi”. Presentar a “Peach” como fuerte, es –aparentemente– una ofensa contra quienes resienten la imposición de la mal llamada “inclusión”.

Esto es una idiotez mayúscula. Primero que nada, “Peach” ha sido “jugable” en los juegos (disculpen que no investigue para brindar la información del título del juego, pero recuerdo a “Peach”, ya hace casi 30 años, sacando cebollas –o remolachas, o algo parecido– del suelo para atacar y defenderse). Segundo, que llevamos décadas con mujeres fuertes en el cine.

Tan pronto pienso que los “anti-woke” pueden ser idiotas, leo la reacción del actor John Leguizamo, para recordar que también los “woke” pueden serlo. Inclusive, tras ver un meme, busqué el reportaje original, pues pensé que era inventado o lo sacaban de contexto.

Pues no: era cierto. Leguizamo, quien fue “Luigi” en una detestada versión fílmica de estos personajes durante los 90, dijo que no vería la cinta animada pues no era “inclusiva”, ya que no hay latinos en el elenco (obviando que la actriz que interpreta a “Peach” es de ascendencia argentina, ¿podemos acusarlo de machista por no considerarla?).

Estimado Leguizamo: Tu interpretación mediocre de «Luigi», y tu absurda indignación, te la perdonamos solamente porque le arreglas el carro a «John Wick».

Así mismo, “wokes” en las redes se quejan de que no hay personajes negros. Los “anti-woke” creen que es una cobardía desprender a “Mario” de su imagen de italiano para cambiarlo a alguien que usa el acento por truco comercial. Los “woke” protestan que no hay presencia LGBT etc. (no conozco las siglas correctas al momento de escribir esto). Los “anti-woke” resienten que a un personaje llamado “Blackie” le cambiaron el nombre a “Spike”. Los “woke” critican que “Bowser” acosa a “Peach”… y así.

Paremos un momento…

Es una película de “Mario”.

No es un movimiento social. No es una causa política. No es un instrumento de lavado de cerebro. Es una fucking película sobre fucking “Mario” que solo quiere fucking entretener.

En algún momento le comentaba a una de mis hijas sobre todas estas controversias, y me respondió lo más sensato que me hayan dicho al respecto: “¿Por qué te importa?”

Tiene razón. Quizás me lo dijo porque es brillante, o porque quería que me callara la boca. Pero lo cierto es eso: Hay una minoría que no tiene capacidad de desprenderse de esta llamada “guerra social”. Sí, me frustra que influya en las historias que disfrutamos (no solo en cine; ahora hay un movimiento a “corregir” libros clásicos para hacerlos “menos ofensivos”). Pero, al final, debo disfrutar producciones que se mantienen al margen de todo eso.

“The Super Mario Bros. Movie” luce haber ignorado todas esas polémicas en su proceso creativo. Que se estén quejando de ambos extremos de esta politización en el arte, significa que la película no buscó agradar a alguno  de ellos. Los productores procuraron complacer a los fanáticos de Nintendo, y a los amantes de las aventuras animadas para toda la familia.

Solo por eso, “The Super Mario Bros. Movie” tiene mi admiración y agradecimiento. Que no se nos olvide nunca: Hay películas diseñadas para que la pasemos felices. Y todos salen felices de la sala. Todo eso, la hace mejor de lo que es.

No dedo cerrar sin compartir mi personaje favorito, el cual aporta un divertido toque de humor negro…

Alexis Sebastián Méndez ©

27 de abril de 2023

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