Sobre entretener y «ofender»

Libro: #37/48 (2024)

Título: Outrageous!

Autor: Kliph Nesteroff

Publicación: 2023

En resumen: Un recorrido por las llamadas guerras culturales, desde el siglo 19 hasta finales del siglo 20, presentando varios eventos de rechazo o crítica a espectáculos de entretenimiento considerados ofensivos en su momento.

¿Por qué leí este libro?: Me fue recomendado por alguien que conoce mi interés sobre el tema. No titubee cuando me percaté que ya he leído libros por este autor, quien es un gran historiador de la comedia.

El contenido: El libro está presentado en orden cronológico, comenzando con las críticas contra los espectáculos de vaudeville, y sigue con los comienzos del cine, los controles en el contenido de la radio, las actitudes racistas durante la Segunda Guerra Mundial, la representación de minorías en TV, el pánico con el rock’n roll, la práctica del “blackface”, algunos comediantes controvertibles de los 80, hasta llegar a los Simpsons.

Entre estos capítulos, dedica gran parte a presentar el fenómeno de batallas culturales como una estrategia política de la derecha.

¿Es bueno el libro?: Como amante de la historia, la sociología y la cultura popular, disfruté mucho del contenido de este libro, pues lo encontré muy interesante. En cambio, el libro es muy desbalanceado y carece de enfoque.

Basado en la introducción, y en historial del autor, pensaba que sería un libro sobre comedia. Y aunque se cubren muchos ejemplos de la comedia (que siempre estará presente en temas de controversia), mucho del material no está relacionada a ese género. Por ejemplo, casi un capítulo dedicado a los filmes “Birth of a Nation” y “Gone With the Wind”, así como a la música rap, filmes religiosos y otras expresiones artísticas.

Voy a culpar ese desencanto a error en mis expectativas. El subtítulo del libro indica “una historia del negocio del espectáculo y las guerras culturales”, y aquí entra mucho más que la comedia.

Aun así, el libro trata de presentar a ambos bandos como atacantes contra las expresiones artística, pero Nesteroff tiene un favoritismo muy notable al presentar los casos. Por ejemplo: Cuando los liberales se quejan de la representación de una minoría en TV, es por defender a los desventajados sociales; pero cuando se quejan los conservadores sobre la representación de minorías en TV, es para quejarse de que ocupen la pantalla con personajes que no son blancos.

Esto es un patrón continuo en el libro: Las intenciones de liberales son nobles, y eran “cancelaciones” justificadas y necesarias. Las intenciones de conservadores son la manipulación de las masas, y sus “cancelaciones” son muestra de persecución (inclusive, lo presenta casi como parte de una conspiración).

Eso no quita que Nesteroff pueda tener razón en algunos de los casos presentados, pero tenemos aquí uno de los muchos libros en que el autor comienza con la conclusión que desea, y entonces comparte toda la información que sostiene su punto.

Esto lo noté desde la introducción, cuando el autor establece un argumento que escucho a menudo: Hace mención de los comediantes que se quejan de que ahora hay muchos temas que no pueden tocar porque que la gente se ha puesto demasiado sensitiva, pero que, si estos cómicos conocieran la historia, sabrían que siempre ha sido así, o peor.

La torpeza en este contrargumento es simple: El comediante contemporáneo, cuando compara contra antes, habla de los 90 y comienzos de este siglo, donde había mucha más apertura y tolerancia con el humor. No se refiere a mediados del siglo pasado. Lamento no tener al autor de frente para explicarle algo tan obvio.

Alexis Sebastián Méndez ©

16 de julio de 2024

Portada
«Birth of the Nation» del 2015, es considerada como la película que definió el lenguaje del cine… El único problema es que los héroes son el Ku Klux Klan
Cuando «Amos n’ Andy», dos personajes negros interpretados por blancos, brincó de radio a TV, los creadores decidieron usar actores negros… y entonces los blancos le explicaban cómo hablar como negro…

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