Otra cara de la Sociedad de la Nieve
Libro: #43/48 (2025)
Título: Desde la cordillera del alma
Autor: Carlitos Páez
Publicación: 2015
En resumen: Recuerdos de uno de los supervivientes de la sociedad de la nieve, incluyendo sus luchas posteriores.

¿Por qué leí este libro?: Ya anteriormente mencioné estar fascinado con la historia de los jóvenes uruguayos que sobrevivieron sobre 70 días en la cordillera de los Andes, después de un accidente aéreo. Después de leer “La sociedad de la nieve”, encontré un libro escrito por Canessa, uno de los dos jóvenes que atravesaron las montañas a pie durante diez días.
Pues he descubierto que hay más libros escritos por supervivientes, y escogí este para continuar conociendo de esta saga. Me interesaba Carlitos Páez por su reputación de oveja negra, pues mientras sus compañeros comenzaron a destacarse en la sociedad, Páez cayó en el vicio del alcohol y de las drogas, llegando inclusive a pasar tiempo en prisión.
El contenido: El libro comienza con los detalles del accidente y el tiempo que pasó en la montaña, mientras narra las peripecias de sus padres por encontrarlo. La segunda mitad de libro habla sobre sus problemas emocionales, los vicios, y su lucha para retomar control de su vida, llegando a convertirse en uno de los conferenciantes más exitosos del grupo de supervivientes.
¿Es bueno el libro?: Este libro debe leerlo exclusivamente quienes desean conocer más detalles sobre el accidente en los Andes. Si no, el contenido puede en algún momento resultar cansón (o más cansón, digamos), pero su experiencia añade muchos ángulos interesantes a esta historia.
Carlitos Páez (para que se ubiquen: es quien rezaba el rosario cada noche, y el más reconocido en aquel momento, pues su padre era una figura famosa en las artes de Uruguay) es muy sincero en sus expresiones, reconociendo sus errores y sentimientos severos hacia sus padres. De la misma manera, es capaz de aplicarlo a la “sociedad de la nieve”.
Hay una presión por santificar este grupo, por lo cual Carlitos fue amonestado por amigos, porque cuando se encontraba en prisión, algunos reprocharon que “nos haces lucir mal”. Cuando leí el libro de Canessa, mencioné mi admiración por su hazaña, pero me irritaba un poco la insistencia en abundar sobre su aparente santidad. El libro de “La sociedad de la nieve”, así como la película, solo exalta lo positivo.
No es que se quiera restar méritos, pero se mata credibilidad. Carlitos es honesto. Es en este libro que me entero que había un puñado de los supervivientes que el resto llamaba “los jubilados”: No estaban heridos, pero pasaron todos los días “tirados a mondongo”, sin ejercer tareas, asumir responsabilidades, esperando que los demás le alimentaran y -para colmo- robando raciones cuando no eran vigilados.
Para mí es importante esto, porque demuestra que se creó una sociedad, y como en toda formación de personas, hay quienes se destacan y hay quienes se recuestan.
El libro me causó alguna dificultad al principio, por la candidez del autor. Salta de un tema a otro como en una conversación, y brinca y retroceda según fluya. Esto puede see refrescante, pero resulta molestoso que, por ejemplo, ésta abundando en un incidente en particular, y de pronto se desliza a hablar de los mentalistas que su madre consultaba, un tema al que dedica demasiadas páginas.
Igualmente, su historia sobre superación a los vicios es inspiradora, y la relaciona muy bien a su vivencia en la montaña. Pero ocurre lo mismo, que se desboca y, dentro de este tema, cae en discursos en contra de la legalización de la marihuana. No se trata de los méritos de su exposición, sino de que se aleja de la línea narrativa.
Fuera de esas quejas, que deben considerarse mejor como observaciones, disfruté muchísimo este libro, y espero pronto seguir leyendo del tema. Tengo tres libros de supervivientes en fila. Si un día nos estrellamos juntos en la montaña, recuerde que estaré preparado.

Alexis Sebastián Méndez ©
21 de julio de 2025