Blue Beetle, Shazam!, y el fin de los superhéroes
CINE / crítica
ALEXIS Sebastián Méndez
Blue Beetle
Protagonistas: Xolo Maridueña, Brune Marquezine, Susan Sarandon, George López
Director: Ángel Manuel Soto
Año: 2023
De qué trata: “Jaime Reyes” es un joven mexicano que recibe los poderes de un escarabajo extraterrestre, o algo así. Ya saben, otro filme de superhéroes.

Opinión: Aunque esto se supone que sea una crítica de la película “Blue Bleetle”, voy a referirme a la situación de las películas de superhéroes. Pero antes, quiero tirarles su agua a algunos fanáticos del cine.
Tengo un amigo que, cuando encuentro fallas en este tipo de género, me acusa de “perder el niño interior”. Eso suena lindo: Te gusta una película, y es porque aún mantienes tu “niño interior”. Tan cute (como en “kiut”).
Bueno, los niños son los peores jueces de cine. Cada vez que alguien me dice “a mi niño pequeño le gustó la película”, debo recordarles que a los niños pequeños le gusta TODO lo que vean en el cine, porque todo es nuevo, y porque, en realidad, lo que disfrutan es la experiencia de la salida al cine. Así que, please, tumben el argumento del niño interior, porque lo único que hace es reconocer su inmadurez intelectual y emocional.
Que es lo que padecen muchos de los que disfrutan del cine de superhéroes.
No estoy diciendo que el cine de superhéroes es malo. Rápido puedo mencionar las primeras dos “Spider-Man” de Sam Raimi, la primera “Iron Man”, la trilogía de “Batman” de Nolan, “Black Panther”, las cintas de los “Avengers” (excepto la leña sobre “Ultron”), entre otros.
A lo que me refiero es que, una cosa es disfrutar estas películas, y otra es mearse de emoción por ellas, como si vieran a Santa Claus en el centro comercial.
Ejemplo: Hace unos meses, estaba en un estudio de edición cuando recién habían estrenado los cortes de “The Flash”. El editor me hablaba emocionado sobre los avances, y yo le explicaba que, en realidad, no me interesaba la película. Pero seguía, con el asunto de los multiversos y que aparecía Michael Keaton (que es un mal “Batman”, lamento informarles), hasta que le dije: “¿Qué parte no entiendes que me importa un carajo la película?”. Lo sé, puede parecer que fui grosero; pero -en realidad- fue que dejé que hablara mi niño interior.
Sigo donde estaba: Una de mis cintas predilectas sobre superhéroes es la primera “Shazam!”. Esta descarga, inclusive, comencé a escribirla cuando vi la secuela de ese filme. Mi desencanto fue tan grande, que decidí que no merecía terminar la reseña.
No puedo decir lo mismo de “Blue Beetle”, que es una película de superhéroes que, dentro de su extenso almacén de clichés gastados, al menos intenta brindar un giro fresco en algunos aspectos que ya mencionaremos. El mayor defecto no tiene que ver con el contenido del filme, sino con su aportación a la oferta de los últimos años: Llega en un género tan machacado, que se siente como cuando uno encontraba películas hechas exclusivamente para videoclub, diseñadas para explotar alguna tendencia actual en el cine.
Un poco sobre el argumento: “Jaime Reyes” (Maridueña, de “Cobra Kai”) es un joven apegado a su familia de inmigrantes mexicanos. Una compañía busca desarrollar la tecnología para crear un ejército de soldados superpoderosos. Cuando adquiere el poder del “escarabajo azul” (no voy a explicar, porque, de todos modos, la cinta no explica mucho), debe enfrentarse a un villano de poderes similares.

Ya en este párrafo podemos identificar elementos mil veces usados. ¿Un héroe y un némesis con poderes similares luchando por un avance tecnológico? “Iron Man”, “Ant-Man” y otros dicen presentes. ¿Una gran estrella del pasado como villano? Gracias, Susan Sarandon. ¿Una compañía poderosa que esconde planes nefastos? ¡Ja! Parece que, en todo el mundo de superhéroes, el único magnate noble es Bruce Wayne.
Lo que distingue a “Blue Beetle” es su enfoque en presentar un héroe mexicano. Hagamos pausa para hablar del fenómeno de la inclusión que tanto ha arruinado el cine.
Volvamos a “Shazam!: Fury of the Gods”. En aquella reseña sin terminar, descargaba contra varios errores del filme (como que el personaje principal pasa casi todo el filme convertido en “Shazam”, y que como superhéroe fuera más inmaduro que su versión adolescente), en particular. contra la inclusión forzada: Las hijas de “Atlas”, a pesar de ser hermanas, son interpretada por Helen Mirren, Rachel Zegler (la “María” de la nueva y terrible versión de “West Side Story”), y Lucy Liu.
Carajo, ¿qué cuesta hacer que las hermanas parezcan eso mismo: hermanas? Uno no puede dejarse absorber por la fantasía de la película. Cada vez que uno las ve, rompe la ilusión de cine. Todo por cumplir con una fiebre moderna de supuesta ceguera racial en el momento de asignar papeles.

La inclusión bien llevada debe ser natural, como entre la familia adoptiva de “Shazam!”, o entre la claque de “Guardians of the Galaxy”. Y claro que merecen papeles protagónicos, pero lo idóneo es que tengan sus propias historias y personajes (contrario a alterar los existentes, aunque los universos paralelos presentan una buena justificación). Por eso funcionan cintas como “Black Panther”, y en gran medida “Blue Beetle”.
Aunque siempre hay quienes andan con el detector de ofensas encendido para buscar insultos en cada minoría presentada en pantalla, creo que hay un estereotipo que debemos considerar agradable en la representación de latinos en el cine, y es la unión familiar. “Blue Beetle” se enfoca en este aspecto. La cinta celebra el amor de padres, abuelos, tíos, hijos y hermanos.
Algunos podrían quejarse de que el filme es muy melodramático en algunos momentos, más en cambio, creo que es parte de la genialidad del director al recoger la cultura mexicana (o podemos extender a latinoamericana), como es la pasión por las telenovelas y los dramas excesivos y dulzones. Casi podría esperarse a la Rosa del Guadalupe. Creo que es valiente encajar estos aspectos dentro de un filme de este género.

Estos aspectos son los que hacen a “Blue Beetle” tan disfrutable, a pesar de los males que arrastra del género de los superhéroes.
Sospecho que este agotamiento no es solo mío, toda vez que los filmes de superhéroes no están brillando en boletería como en el pasado. “The Flash”, para desaire de mi amigo editor, ha sido uno de los grandes fracasos del año. “Shazam! Fury of the Gods” fue otro desastre (merecido), “Blue Beetle” habrá estrenado en primer lugar, pero con un número muy bajo para su género. La única que ha tenido éxito este año (y que disfruté mucho) fue la tercera “Guardians of the Galaxy” pero, si lo piensa, aunque sea de Marvel, estas cintas son más aventuras espaciales que películas de superhéroes.
Las cintas más exitosas de este año cuentan con elementos de cultura popular que no tenían buen tratamiento de cine (“Mario” y “Barbie”). En fin, el público sigue atraído por lo reconocido, pero a la vez sigue buscando novedad. “Blue Beetle” tiene ambos elementos, pero llegó muy tarde; algo así como la madurez a quienes todavía se protegen tras su niño interior.
Alexis Sebastián Méndez ©
24 de agosto de 2023